El aceite esencial de lavanda es uno de los más conocidos y utilizado en el mundo. Es especialmente eficaz para tratar problemas nerviosos (estrés, ansiedad, insomnio) y para problemas dermatológicos, en particular dermatosis.
Calmante, relajante, sedante, antidepresivo, ansiolítico, equilibra las emociones, regulador del sistema cardíaco, tónico y regenerador cutáneo, cicatrizante y en cuanto a uso doméstico en el hogar es un excelente anti-polilla natural. Es uno de los pocos aceites esenciales que pueden aplicarse de forma pura.
Ayuda a desconectar la mente y es particularmente interesante para meditar.
Advertencia
Puede provocar somnolencia a personas con presión arterial baja. No utilizar en mujeres embarazadas y niños pequeños.
Nota. Siempre consulte con un especialista autorizado cuando se use aceite esencial como remedio de salud o para aromaterapia.
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